Enseñarle a conducir un tractor a un muchacho
debe ser como enseñarle a arrastrar
el peso de toda la tierra.
Pero ¿quién podrá remolcar los adversos
embates del destino
en el tractor azul y la ruta fangosa
de la muerte
y bajo una jornada gris que promete
nada, sólo
disparos y crueldad?
¡Pam!
¡Pam!, ¡pam!, ¡pam!
¡Pam!, ¡pam!, ¡pam!
¡Pam!
¡Pam!
¡Pam!, ¡pam!
¡Pam!
Entonces desde atrás, entre la selva, se escuchan
ráfagas,
ráfagas calibre militar, estilo Comando Jungla,
ese comando con adiestramiento antiterrorista
entrenado en Colombia y que la autoridad afirmó ser irreal,
hasta ahora, que llenó de plomo
un tractor con dos jóvenes mapuche:
ráfagas venidas desde el terreno, pero
concertadas desde un helicóptero,
casi como una orden del cielo,
cielo nacional, soberano,
tan privado que se asemeja a
la tierra.
Y el Sargento Carlos Alarcón nunca sabrá
por qué lo hizo, por qué jaló su arma,
ésa que su país puso en sus manos luego de
haber sembrado en su mente la doctrina de
la fuerza –“Por la razón o…”– sobre su razón –“…la fuerza”–,
aboliendo su humanidad,
por qué apuntó contra un objetivo sin pensarlo,
comparable a un burócrata que firma junto a un escritorio:
el GOPE no se lo dirá,
pues el celo policial no sabe de justicia
más que de poder.
Pero el Estado chileno, sin duda, obtendrá provecho:
pérfido con sus peones y opresor con su pueblo,
después de que los diarios hagan su parte,
“Presidencia anuncia reforma en Carabineros”,
el terrible gobierno continuará inventando que
los terroristas, ancestrales,
para nada civilizados –es que no son estancieros–,
reticentes a las forestales y a la dinámica del progreso,
ya están entre nosotros y huyen en tractores,
tractores azules, dignos de un salpicado
rojo intenso, craneal,
el rojo vivo de
la bandera.
¡Pam!
¡Pam!, ¡pam!, ¡pam!
¡Pam!, ¡pam!, ¡pam!
¡Pam!
¡Pam!
¡Pam!, ¡pam!
¡Pam!
Kamilo Katrillanca, weichafe,
…..Hijo, te parí valiente,
nieto del lonko Juan Katrillanca,
…..te vestí con la herencia de una nación guerrera,
único tractorista a disposición de la gente de Temu-Cuicui,
…..tejí tus ropajes cada noche,
y dedicado a trabajar el predio familiar
…..tú soñabas desde mi voz, mi vlkantv,
para su mujer y su hija y su hijo que aún no nacía,
…..yo cantando a la libertad.
iba, como cada día, camino adonde sus padres
en el tractor azul y la ruta fangosa
y acompañado del muchacho al que le enseñaba a conducirlo,
…..Hijo, forjé tu lengua honesta,
fuera de la línea de fuego,
…..con trozos de tierra, de agua de mar,
desarmado,
…..xayenko, mawvnko, karrvltu lawen.
cuando el helicóptero ordenó la persecución de
dos comuneros que, en dudosa escena,
escapaban con imparable velocidad
en ese tractor azul y esa ruta fangosa en los que,
luego, en la indigna gesta de un disparo desde la espalda,
…..No se mueren los que han nacido en la resistencia,
…..no mueren los que han abrazado a su tierra madre con su propia vida,
…..no se mata a quien le pone el pecho a las balas cobardemente por la espalda.
los efectivos del Comando Jungla los asaltaron,
en tanto Kamilo Katrillanca, noble líder,
…..hijo, te estoy llorando,
con una mano manejaba el vehículo y con otra protegía
…..un suspiro que desgarra la existencia,
la cabeza de su joven amigo más que la propia.
…..es cierto, te estoy llorando,
…..y como te lloro voy pariendo más resistencia.
Y, así como el tractor azul, se teñirán de rojo también
los bosques y los ríos y los vientos
del Wallmapu,
…..Te llamé weichafe,
porque esto es Chile, y aquí,
lo sabía Kamilo Katrillanca y lo sabrán además
los poetas que, al igual que Kelv Liwen, lo canten,
…..te forjé al flagor de nuestro resistencia,
esto es Chile y aquí
aún no ha cesado la lucha sangrienta,
aún no es hermano el que ayer opresor.
…..te parí y te vuelvo a abrazar en tu vuelo,
…..Kamilo Katrillanca.
¡Pam!
¡Pam!, ¡pam!, ¡pam!
¡Pam!, ¡pam!, ¡pam!
¡Pam!
¡Pam!
¡Pam!, ¡pam!
¡Pam!